sábado, 23 de julio de 2016

Idiota

Si, a veces las cosas nos suceden por idiotas. Porque quizá no seamos tan malas como nos gustaría. Somos esas que dicen: A la próxima te vas a enterar.... ¿Y luego qué? Nah, ladramos mucho y mordemos poco. Nos cabreamos, nos dura el cabreo una semana y luego que? Oootra vez igual.
Tsss como lo odio.
Ojalá pudiera ser todo lo cabrona que a veces me gustaría. Pero que va, no puedo serlo. Misión Imposible.
Pero bueno, si no podemos ser cabronas por lo menos no seamos idiotas. Aprendamos a valorarnos, a querernos y al que no le guste carretera y manta. Ya está bien.
Aprendamos a ser la primera y única opción en el menú de opciones de nuestra vida. No hay que poner a nadie delante NUUUUUUUUUUUUUUUUUUUNCA! Jamás de los jamases.
Jamás tenemos que tratar como prioridad a aquellos para los que solo somos una opción. Que les den. Quien quiera algo que se ponga a la cola y que espere.

Y quien quiera jugar que juegue pero que tenga cuidado. Quizá la próxima vez sepamos jugar mejor...


lunes, 18 de julio de 2016

¿Y ahora qué?

El orgullo...eso que a veces tanto nos sobra y muchas otras nos juega una mala pasada. ¿De verdad existe el orgullo o es el miedo disfrazado?
Estás hablando con una persona de esas que te hace "tilín", de pronto sucede algo raro que te enfurece y saca lo peor de ti, la grandísima borde que llevas dentro. Pero la culpa no es tuya no. Al menos hasta que hablas con tu mejor amiga y te hace ver las cosas desde fuera, desde otro punto de vista, Eso que ella sabe hacer super bien, eso que tanto necesitas, que a veces te saquen de tu burbuja, de tu zona de confort. Entonces te das cuenta de que puede que sí, puede que la cagases más de la cuenta... ¿y ahora qué ?.

Aquí viene el dilema del millón:

¿Le hablo para poder "arreglar el error" o paso? Porque claro, si le hablo va a pensar que estoy detrás, que me importa...pero claro si no le hablo puede que esté pensando que soy una borde y una grandísima egoísta...¿y por qué no habla él, porque pasa de mí? ¿ tendrá razón la loca de mi amiga y no lo hará porque le sentó mal alguna que otra contestación?

Ojalá pudiésemos saberlo, me ahorraría varios quebraderos de cabeza la verdad... Pero desgraciadamente si las cosas no se hablan, difícilmente se arreglan por arte de magia.

Tiene razón, a veces nos cabreamos, nos cegamos, contestamos y luego pues nos arrepentimos. Si eres taaan impulsiva como yo te sentirás baastante identificada. Pero cuando alguien nos abre los ojos y nos dice las verdades a la cara y no lo que queremos oír vemos que quizá la situación pueda verse desde distintos puntos de vista. Esas son las verdaderas amigas, no las que te bailan el agua.

¿Qué me dice mi "pepito grillo"? Pues que va a ser... que le hable, que de mi brazo a torcer, que sí que la he cagado como otras tantas veces pero que deje a un lado el ORGULLO.

¿Qué voy a hacer? Pues no lo sé ni yo. Supongo que seguiré pensándolo a lo largo de la tarde y a ver que sale...

Continuará..........

domingo, 17 de julio de 2016

Esa soy yo

Sentirse idiota, pero idiota de verdad, de libro, sin que falte una sola característica de la descripción que ofrece la R.AE. Así me siento, sí, no hay lugar a dudas. ¿Por qué? pues no sé. Supongo que es una sensación parecida a la del fracaso, a la de "querer y no poder". Como cuando estás intentando llevar arena de un sitio a otro y sientes que se te escapa de las manos. Inevitable. Sí. Así es mi vida. 

Quieres dejarte sorprender pero en el fondo sabes que siempre será lo mismo, la misma historia de siempre cambiando uno de los personajes principales. Pero al fin y al cabo la misma. Las acciones puede que al principio parezcan diferentes pero el resultado ha sido, será y seguirá siendo el mismo. Yo creo que eso no hay dios que lo cambie. 

Quizá hay que aceptar las cosas como vienen. Aceptar que mi vida es así. Un tsunami de emociones que acaban doliéndote inevitablemente. Me pregunto por qué viviré todo hasta este extremo. Por qué no puedo ser una de esas personas a las que le resbala todo y no tiene sentimientos. Frías, distantes y calculadoras. Sí. Puede que suene feo pero en el fondo son las que menos sufren. Las que nunca tienen miedo. Porque pase lo que pase y hagan lo que hagan les importará lo mismo. Nada.

Me pregunto por qué me duelen tanto las cosas. Por qué siento tanto las cosas. Quizá sea porque cuando hago algo pongo todo el corazón en ello. Y quizá debería guardarlo, protegerlo en una urna de cristal donde nada ni nadie pueda verlo, oírlo ni sentirlo. Quizá así sea inmune a eso que llaman sentimientos. Quizá así no consiga pensar en anda ni en nadie.

Soy una de esas personas que cuando tiene algo en la cabeza, ya sea positivo o negativo, no puede dormir. Dándole vueltas y más vueltas. Esa soy yo. No puedo evitarlo. Y mira que lo intento. Te juro que lo intento. Pero nada, es como dejar de ser rubio o moreno. Por mucho que tiñas, el verdadero color sale a la luz.

También soy un poco pesimista, aun que yo más bien diría realista. Pero claro, teniendo en cuenta mi historial...no es raro. Más bien creo que es un mecanismo de autodefensa creado por la propia mente para evitar (en la medida de lo posible, osea casi nada) el sufrimiento. Y es que yo cuando vivo las cosas las vivo. Ya sean muy buenas o muy malas.

Esa soy yo y esos, son mis "defectos"